Mañana celebraremos la fiesta de la Divina de la Misericordia tiene lugar en el segundo Domingo de Pascua y nuestra parroquia se ha “vestido de fiesta” para celebrarla.
La Fiesta de la Divina Misericordia fue instituida por San Juan Pablo II, el cual también canonizó a Sor Faustina, la gran Apóstol de la Divina Misericordia, a la cual el Señor le revelo esta devoción y espiritualidad tan promovida por los tres últimos Papas. Este día están abiertas las compuertas del cielo y hay indulgencia plenaria de culpa y pena. Desde luego también es un día muy propicio para confesarse. Los Apóstoles de la Divina Misericordia de nuestra parroquia estaremos en la misa de 13:15. Después de la misa ya se hacen los voluntarios y miembros nuevos y renovamos las promesas, recibiendo la bendición del sacerdote.
A continuación, os anotamos algunos datos sobre esta fiesta:
- La celebración de esta fiesta se origina en las revelaciones privadas de Santa Faustina Kowalska, religiosa polaca que recibió mensajes de Jesús sobre su Divina Misericordia en el pueblo de Plock, Polonia.
- En el año 2000, San Juan Pablo II canonizó a Santa Faustina y durante la ceremonia dijo que “es importante que acojamos íntegramente el mensaje que nos transmite la palabra de Dios en este segundo domingo de Pascua, que a partir de ahora en toda la Iglesia se designará con el nombre de ‘Domingo de la Divina Misericordia’”. (Homilía, 30 de Abril, 2000).
- En su comentario teológico sobre el mensaje de Fátima, el entonces Cardenal Joseph Ratzinger, ahora Papa Emérito Benedicto XVI, escribió: “podemos añadir que a menudo las revelaciones privadas provienen sobre todo de la piedad popular y se apoyan en ella, le dan nuevos impulsos y abren para ella nuevas formas. Eso no excluye que tengan efectos incluso sobre la liturgia, como por ejemplo muestran las fiestas del Corpus Domini y del Sagrado Corazón de Jesús”.
- Entre otras cosas, ofrece una indulgencia plenaria: “para hacer que los fieles vivan con intensa piedad esta celebración, el mismo Sumo Pontífice (Juan Pablo II) ha establecido que el citado domingo se enriquezca con la indulgencia plenaria para que los fieles reciban con más abundancia el don de la consolación del Espíritu Santo y cultiven así una creciente caridad hacia Dios y hacia el prójimo, y una vez obtenido de Dios el perdón de sus pecados, ellos a su vez perdonen generosamente a sus hermanos”. [Decreto de la Penitenciaría Apostólica del 2002]
- Esta imagen le fue revelada a Santa Faustina en 1931 y Jesús mismo le pidió que se pintara. Luego el Señor le explicaría su significado y lo que los fieles alcanzarán con ella. En la mayoría de versiones Jesús se muestra levantando su mano derecha en señal de bendición, y apuntando con su mano izquierda sobre su pecho fluyen dos rayos: uno rojo y otro blanco.