Desde la misa de Fin de Año del jueves 31 y en todas las del 1 de Enero, Solemnidad de la Madre de Dios, estará presente el Cáliz profanado.
Se trata de un cáliz rescatado de la iglesia sirocatólica de Qaracosh, una de las de la llanura de Nínive profanadas por Daesh en Oriente Medio, que ha traído a España la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada. El Cáliz se usó en la liturgia para consagrar el el vino en la misa y ahora vuelve a hacerlo.
Tras ser recuperado, el cáliz se volvió a consagrar y, desde entonces, «no ha parado de viajar por todo el mundo», pudiendo apreciar los fieles «los destrozos que le ocasionaron las balas». Está recorriendo gran parte de las diócesis de España y en día 1 de Enero tendremos la gracia de tenerlo en nuestra parroquia del Corpus Christi.
Este Cáliz nos ayuda a visualizar lo que algunos de nuestros hermanos en la fe está sufriendo en estos momentos por vivir con fidelidad su amor al Señor.