¿Sabías que hace unos años, uno de nuestros hermanos en Cristo dedicó unas palabras a nuestra parroquia? El poema está enmarcado y puede leerse en un cuadrito sencillo de la sacristía. ¿Lo conocías? Si no, hoy te lo compartimos:
Cúpula azul y blanca
Escondida entre palmeras datileras,
de palmas verde grisáceas,
de troncos grises y estrechos
que aún así hasta su cielo se alzan.
¡Y qué azul cielo!
Que si una nube le acompaña,
aparece chiquita y blanca,
de un brillo blanco y suave
como sus tejas de cerámica.
Arquitectura de sus casas
que su avenida engalanan,
regionalismo sevillano
de su época que me encana.
Fachada imponente
y aún así inacabada,
enormes trazos de un boceto
que ya recoge las miradas.
Y a su vera,
verdes oscuros,
dos cipreses centinelas
apuntan al cielo juntos.
Crecieron hasta sus campanas,
se mantienen viejos pero erguidos,
feligreses del Templo que los ampara,
plantaremos savia nueva de sus hijos.
Iglesia del Corpus Christi,
cúpula azul y blanca,
¡que en el cielo de Sevilla
sigas llamando a tu casa!
Valeriano Albañil Sanchez, mayo de 2016.
